jueves, 28 de abril de 2011

Es el aceite de coco la nueva maravilla?

Algunos consideran que el aceite de coco es una especie de sustancia mágica que no sólo nos permite cocinar platillos deliciosos sino que también nos brinda beneficios importantes para la salud. En el extremo opuesto, otros consideran que el aceite de coco es uno de los más nocivos y recomiendan consumirlo con moderación, ya que tiene una gran cantidad de ácidos grasos que pueden ser malos para la salud. ¿Qué dicen las investigaciones en este momento? Aquí te contamos más detalles sobre este debate en torno al aceite de coco.

Si te dijeran que existe un aceite tan saludable que hasta te ayuda a curar enfermedades, ¿lo creerías? Pues ten cuidado, por lo menos duda. Cuando te ofrezcan algo que sea tan bueno que parezca casi milagroso, es preferible que busques más información para estar totalmente seguro/a de que las cosas son tal cual lo aseguran.

Seguramente has escuchado previamente que las grasas saturadas hidrogenadas (es decir, las que se vuelven sólidas a la temperatura ambiente, como la mantequilla) son malas para la salud del corazón. Sin embargo, versiones recientes dicen que las grasas saturadas naturales como las que se encuentran en el aceite de coco, son buenas para tu salud.

¿Por qué dicen eso? Lo dicen porque el aceite de coco contiene grasas saturadas en estado líquido. Quienes defienden las propiedades saludables del aceite de coco, mencionan que consumirlo puede traer los siguientes beneficios para la salud:

Promueve la salud del corazón.
Ayuda a combatir la diabetes.
Favorece al sistema inmunológico o de defensas y ayuda a tener un metabolismo saludable
Proporciona una fuente de energía inmediata y permite mantener o perder peso
Ayuda a mantener la piel con apariencia saludable y juvenil.

¿Suena demasiado bueno para ser verdad? Si esto fuera cierto, el aceite de coco sería una especie de condimento mágico para cocinar y mantener la salud. Quienes están a favor de este aceite y lo consideran saludable, dicen que el secreto de este aceite está en el denominado ácido láurico, algo que el cuerpo convertiría en otra sustancia con propiedades anti-bacterianas y anti-protozoarios, es decir, que puede destruir los virus recubiertos de lípidos, como los del VIH y herpes, el sarampión y la gripe.

Sin embargo, ¡no todo lo que brilla es oro! Frente a los defensores de este aceite, varias asociaciones nacionales, internacionales y especialistas advierten que todavía faltan estudios que corroboren todos estos beneficios y reclaman evidencias científicas.

Así, por ejemplo, ni la Asociación Americana del Corazón (AHA, por su siglas en inglés) ni la Guía Dietética del 2010 del gobierno de los Estados Unidos sugieren que el aceite de coco sea mejor o preferible a otras grasas saturadas. Incluso, recomiendan que su uso se limite del 7 al 10 por ciento de las calorías totales ingeridas al día, ya que consideran que aumenta el riesgo de contraer enfermedades cardíacas.

En este sentido, algunos especialistas consideran que el aceite de coco puede ser mejor que la manteca y otras grasas saturadas, pero que no es más saludable que los aceites vegetales líquidos. Asimismo, destacan que lo importante es con qué alimentos se utiliza este aceite y cómo está compuesta la dieta en general.

Por todo esto, hasta que existan más pruebas que puedan probar los efectos saludables del aceite de coco, la recomendación es que lo consumas con moderación si es de tu agrado, pero no en busca de reemplazarlo por otros como una alternativa más saludable.

viernes, 22 de abril de 2011

Hatha Yoga, el Yoga del sereno vigor

Es el tipo de Yoga que más se práctica en Occidente aunque muchos sabemos muy poco de sus bases y de su origen.

Así, el Hatha Yoga ayuda al practicante a obtener el pleno control sobre las funciones de su cuerpo físico, convirtiéndose en su propio maestro en vez de su esclavo. Normalmente la mente consciente sabe muy poco de lo que pasa por debajo del nivel de la consciencia. Un estudiante de Hatha Yoga aprende, gradual y conscientemente, a percibir y controlar muchos procesos que comúnmente no percibe.

Hatha Yoga significa la unión entre el "Ha" y la "Tha", es decir, entre el sol y la luna o, lo que es lo mismo, entre la energía positiva y la negativa, la masculina y la femenina, el prana y apana. De esta forma el Hatha Yoga pretende no sólo fortalecer el cuerpo sino también armonizar y equilibrar todo el sistema nervioso, incluyendo ejercicios de respiración (pranayama), purificaciones corporales (kriyas) y trabajos gestuales (mudras) A medida que se practican las posturas físicas y a través de una relajación muscular y del ritmo respiratorio, se va entrando en un estado mental sereno, tranquilo y óptimo que permite conectar con otros planos sutiles del ser.

Orígenes del Hatha Yoga

El creador del Hatha Yoga fue el maestro Shiva Mahadeva o Mahdeva Nath (según sus discípulos, una encarnación del dios Shiva) Otro de los impulsores del Hatha Yoga fue Gorakshanath, más conocido como Goraksha, que escribió varios libros como el "Goraksha samhita siddha siddhanta paddhati", el "Yoga martanada", "el Yoga siddhanta paddhati", "el Yoga bija", y "el Yoga chintamani". Goraksha -al contrario que Patanjali (fundador del Ashtanga Yoga)- no creía en los Vedas (escrituras sagradas) sino en los Agamas shivaístas (saiva-tantra) y en los tantras del budismo vajrayana. Goraksha eliminó dos de los ocho pasos de Patanjali. A partir de entonces el Hatha Yoga de Goraksha fue conocido como shat yoga o gatha yoga.

Los Caminos del Yoga

En el Hatha Yoga hay seis pasos (angas), es decir seis reglas que no se pueden evadir si verdaderamente se quiere alcanzar el objetivo final del Yoga (samadhi), la consecuencia automática de todos los pasos. Son:

Asana, posturas físicas asumidas por el cuerpo.
Prana-samrodha, control de la energía vital.
Pratyahara, recogimiento sensorial o introspección.
Dharana, concentración.
Dhyana, meditación.
Smadhi, integración.
Goraksha eliminó dos de los pasos de Patanjali: los yamas (prohibiciones, como la no violencia, la veracidad, el no robar, el celibato, el desapego) y los niyamas (preceptos, como la limpieza, la tranquilidad, la automortificación, el estudio de los Vedas y la devoción a Dios), que eran de origen védico.
(La descripción completa de estos pasos se incluirá en un próximo artículo de las Ramas del Yoga, dedicado al Ashtanga Yoga)

Teoría y práctica del Hatha Yoga

La obra más antigua y completa que existe del Hatha Yoga es el Hatha Yoga Pradipika, que significa Luz sobre el Hatha Yoga y data de aproximadamente del siglo VI de nuestra era. El maestro Swatmarama, autor del texto, se propuso reunir el conocimiento teórico y práctico que hasta entonces se encontraba disperso en los diferentes textos sagrados.
El Hatha Yoga Pradipika está estructurado en 4 libros que, a su vez, están compuestos de pequeños slokas o párrafos.

Libro I del Hatha Yoga, Asana

La obra de Swatmarama comienza destacando la importancia del cuidado del cuerpo físico para la expansión de la mente y la consecuente autorrealización. Swatmara señala cómo debe practicarse el Hatha Yoga, desde el entorno ambiental al lugar adecuado para la práctica, aportando consejos de conducta. Las asanas son consideradas como la primera parte del sistema. Se describen sólo unas pocas. Su propósito es lograr un cuerpo sano y preparado para mantenerse firme en las posturas de meditación. También se tratan temas de nutrición con la finalidad de que el organismo, libre de toxinas, pueda realizar las prácticas.

Libro II del Hatha Yoga, Shatkarma y Pranayama

Hay seis shatkarmas, que son considerados como la antigua base del Hatha Yoga. Se trata de seis ejercicios de limpieza interna y externa, necesarios para asegurar la salud del cuerpo. Posteriormente se procede a la práctica del Pranayama, ciencia de la respiración, para la purificación de los canales energéticos (nadis) por los que circula la energía (prana)

Libro III del Hatha Yoga, Mudra y Bandha

La Kundalini se identifica como Devi o diosa creadora de todo el Universo. A través de las prácticas del Hatha Yoga la Kundalini asciende a través del canal energético central (sudhumna) Se describen las tres llaves (bandhas) cuyo propósito es dirigir el prana hacia el canal central así como diversas actitudes (mudras) para expandir el prana en puntos localizados del entramado energético.

Libro IV del Hatha Yoga, Samdhi

En esta última parte del Hatha Yoga Pradipika se incluyen referencias simbólicas al estado supremo del ser y se describen los métodos adecuados para alcanzar y mantener ese estado. A través de las prácticas del Hatha Yoga se puede alcanzar el vacío (shoonya) "Dentro hay vacío, fuera hay vacío, como vasija vacía en el espacio, completamente llena internamente, completamente llena externamente, como un puchero en el océano".

Daya Kaur

Periodista, profesora de Yoga, creadora del programa YogayMovimiento®, instructora de Pilates y formadora de la Federación Madrileña de Gimnasia.

En Balance Center impartimos clases de Hatha Yoga, ven y conoce está ancentral práctica.

Cambia tu cuerpo...Cambia tu vida.

jueves, 14 de abril de 2011

No creas en ofrecimientos "milagrosos"

¿Ya has probado todas las dietas y ninguna funciona, te cansaste de promesas milagrosas que nunca se cumplen y ya no sabes qué hacer para perder esos kilos de más, que no te permiten sentirte cómod@ o verte a gusto frente al espejo? Entonces, este artículo es para ti. Aquí te damos algunas recomendaciones para perder peso, y te contamos los mitos que debes de olvidar si buscas resultados efectivos.

Mariela siguió todos los pasos que le indicaba la dieta que prometía librarla de hasta 7 kilos en las primeras dos semanas: se olvidó de los carbohidratos (azúcares) y empezó a comer más proteínas como carne, pescados, huevo y queso. Luego, empezó a incorporar poco a poco los carbohidratos. Pero no lo logró.

Por su parte, Carlos siguió una dieta que también prometía resultados increíbles: primero debía comer todas las proteínas que quisiera, sin límite; luego agregar vegetales, en un tercer momento, tenía que incorporar frutas, queso y pan, y por último podía comer lo que deseara. Todo esto, siempre y cuando mantuviera un día de su dieta exclusivo para comer proteínas y recordara tomar 3 cucharadas de té de salvado de trigo a diario. Así lo hizo, sin embargo, lo único que logró fue sacrificarse durante más de un mes y perder el agua que retenía su cuerpo (no la grasa), que inicialmente parecía ser una real pérdida de peso pero las libras o kilos volvieron rápidamente tan pronto dejó la dieta.

Casos como los de Mariela y Carlos hay miles, y dietas que prometen resultados milagrosos también. Lo importante es no caer en la trampa. Por eso, aquí te damos algunas recomendaciones que debes considerar si deseas bajar de peso.

Regla número 1:

No esperes resultados milagrosos. Lamentablemente, para bajar de peso y mantener ese peso a lo largo del tiempo es necesario adoptar hábitos saludables y sostenerlos. Además, ten en cuenta que una dieta duradera en general se logra eliminando kilos poco a poco, y no de manera rápida.

Regla número 2:

Olvídate de que hacer dieta es aburrido e implica privarte de las cosas que más te gustan. Por el contrario, para que puedas incorporar nuevas costumbres alimenticias y que puedas mantenerlas es importante que te resulten agradables. Hay muchas opciones saludables que puedes sumar a tu dieta.

Además, seguramente haya cosas en tu rutina que no te dejan bajar de peso. Con ayuda profesional calificada puedes detectarlas y eliminarlas. Anímate, a veces sólo implica no comer entre comidas o evitar descontrolarte con dulces luego de la cena.

Regla número 3:

Otro error en el que se suele caer a la hora de intentar perder peso es suspender comidas. ¡Eso nunca! Recuerda: ¡brincarse comidas engorda! ¿Por qué? Porque ayuda a acumular hambre y aumenta la tentación de comer alimentos con más calorías, ya que cuando el estómago está vacío, sus paredes producen una hormona llamada grelina, que le avisa al cerebro que tenemos hambre, y el mensaje se traduce en una búsqueda desesperada de alimentos grasos.

Tomando esto en consideración, ¿qué puedes hacer para incorporar hábitos saludables y perder definitivamente esas libras o kilos que te quitan el sueño? Los siguientes trucos podrían ayudarte:

Utiliza platos pequeños. Aunque parezca una tontería, esto puede reducir el consumo de comida hasta en un 22%, ya que la mayoría de las personas tiende a comer todo lo que está en el plato.

No confundas hambre con sed. A veces la sensación es similar y puedes confundirlas. Para darte cuenta, cuando sientas ganas de comer toma un vaso de agua y espera 20 minutos, si sigues con hambre, entonces come; sino, pues no era más que sed.

Consume alimentos con proteínas, como carnes, pescados, huevos, lácteos y legumbres: te ayudan a sentirte satisfecho durante más tiempo.

Toma caldo de verduras. Los alimentos triturados pueden producir mayor sensación de saciedad. Además, al aumentar la proporción de agua, los alimentos permanecen en el estómago y hacen que te sientas satisfecho por más tiempo.

Elige alimentos bajos en grasas y calorías. Permiten que no te prives de ninguna comida y te hace que consumas menos calorías.

Lleva un registro diario de lo que comes. Te ayuda a detectar tus errores y las cosas que consumes que, de otra forma, no te darías cuenta.

Por último, recuerda que para perder peso y mantenerte debes llevar una rutina de ejercicio. Esto es esencial. Las tareas domésticas como limpiar la casa, la jardinería y lavar el carro o auto, por ejemplo, son una forma de actividad física.

Los ejercicios aerobicos a un ritmo intermedio por lo menos 4 veces a la semana te ayudaran a quemar 1/4 parte de las calorias que consumes en el día, activando tu metabolismo y haciendote perder peso con mayor rapidez. El ejercicio no solo te ayudará a reducir tu peso sino también mejorar considerablemente tu salud.

Olvídate de los milagros y enfrenta la realidad: bajar de peso toma esfuerzo y constancia, pero lo más importante es que: ¡es posible!

Cambia tu cuerpo...Cambia tu vida

miércoles, 6 de abril de 2011

Se acercan las vacaciones

Pronto te irás de viaje y aunque te alegra, hay algo que te cuesta dejar: tu rutina de ejercicios. Temes que las próximas vacaciones o un viaje de negocios rompan con la disciplina que tanto te ha costado mantener y puedas subir de peso. Además, sientes que extrañarás esa energía vital que sólo el ejercicio te brinda. ¡Entonces no la dejes! Mira estos secretos para hacer ejercicio cuando viajas.

Ejercicio en los viajes de trabajo

Cuando Andrés fue ascendido como representante nacional de ventas, tenía razones para estar muy feliz, y lo estaba. Pero había algo que muy en el fondo le molestaba… viajaría cada semana y ya no podría seguir su rutina diaria de ejercicios. Al principio trató de asumirlo, hasta que durante un viaje sintió que realmente le estaba haciendo falta la actividad física. Pensó que el trabajo no debía ser una excusa para dejar de hacer ejercicio y se dedicó a buscar opciones para que sus viajes y el ejercicio fueran compatibles. Estos son sus secretos:


1. Ejercicio donde vayas. Actualmente muchos hoteles tienen gimnasios y piscinas para sus huéspedes. Pregunta si en el tuyo hay alguno, o si al menos hay un parque o gimnasio cercano al que puedas ir. En algunos hoteles o ciudades puedes hasta alquilar bicicletas o patines en línea.

2. Planea. Antes de cada viaje, piensa en los posibles impedimentos que puedas encontrar para seguir tu rutina de ejercicios: un horario exigente de reuniones o actividades, un clima diferente, falta de facilidades deportivas. Y piensa cómo lo vas a solucionar, no esperes a estar en tu destino temporal para decidirlo. Organiza tu horario con anterioridad, y deja, de preferencia,1 o 2 horas en la mañana para hacer ejercicio, pues las noches se ocupan fácilmente con actividades sociales.

3. Incluye en tu maletín de viaje tu ropa deportiva o lo que necesites para hacer ejercicio. Es cierto que no puedes llevar la máquina elíptica en tu maletín, pero sí puedes llevar un lazo para saltar, tus zapatos de caminar, el traje de baño o hasta una banda de resistencia.

4. Dale rienda a la creatividad. Aunque no parezca, hay muchos momentos en los que puedes hacer ejercicio durante tu viaje de negocios. Puedes caminar en el aeropuerto mientras esperas tu vuelo, caminar hasta los lugares de reunión en lugar de ir en el auto, caminar para conocer la ciudad donde estás, subir y bajar las escaleras del hotel en lugar de usar el ascensor, hacer ejercicios de estiramiento en tu habitación o buscar algún programa de aeróbicos en la televisión.

5. Busca compañía. Averigua si los colegas que viajan contigo también hacen ejercicio para programar actividades juntos, les animará.


Ejercicio en las vacaciones

¿Quién no quiere salir de viaje durante las vacaciones? Aunque Ángela jamás le confesó a nadie en su familia, había algo de las vacaciones que no le gustaba: que perdía su rutina de ejercicios y eso hacía que ganara rápidamente las libras que tanto trabajo le había costado perder. Hasta que un día dijo “¡no más!” y organizó la manera en que el ejercicio y las vacaciones fueran compatibles. Estos son sus secretos:

6. Saca tiempo. En estás de vacaciones con la familia o con los amigos, nadie se va a molestar si sacas un tiempo para hacer tu rutina. Elige preferiblemente las mañanas, pues las noches es bastante seguro que se atraviese otro plan familiar.

7. Prepárate. Siempre incluye en tu maletín tus zapatos de caminar y tu traje de baño, nunca sobran. Y averigua con anterioridad cuáles son las posibilidades de hacer ejercicio en el lugar al que vas.

8. Camina todo lo que puedas. En lugar de ir en auto a los lugares que vayas a conocer, trata de hacerlo caminando. Consigue un mapa de la ciudad con recorridos a pie. Aprovecha para caminar en el centro comercial, en los museos, en la playa, en el parque. Mientras conoces un lugar nuevo, ni te darás cuenta que estás haciendo ejercicio.

9. Incluye a los demás. Trata de programar actividades recreativas en familia o en grupo que incluyan algún tipo de actividad física como un tour caminando, dar un paseo en bicicleta por un parque, montar kayak en un lago, un campeonato de volleyball o de fútbol playero. Así logras involucrarlos a todos en la actividad y divertirte mientras te mantienes activo.

No es horrible ni imposible. El hacer ejercicio mientras viajas es totalmente factible y además te puede traer muchos beneficios. Por ejemplo, durante un viaje de negocios el ejercicio te ayuda a bajar los niveles de estrés y mantener tu energía en alto. Y cuando estás de vacaciones, te ayuda a liberar el estrés y el cansancio que has acumulado durante en tu cuerpo durante todo el año. ¡Aprovéchalo!